sobre mí

Este “sobre mí” no tendría sentido sin un tú leyendo ahora. Así que, primero que nada, gracias por llegar hasta aquí e interesarte por mi trabajo. Durante estas líneas, voy a tratar de acercarme un poquito a tu lado.

Como verás mi trayectoria es amplia y multidisciplinar, de ahí que mi visión del ser humano sea profunda y pueda acompañarlo de una manera holística (cuerpo-emociones-mente-alma).

Desde bien niña, el interés por mis recovecos internos estuvo presente, por lo que también me interesaba el interior de las demás personas. Las escuchaba, me analizaba, reflexionaba. Además, sentía una relación especial por lo místico y espiritual.

Durante mis primeros estudios en Historia del Arte, como no, mi interés se enfocó en la comprensión del sentir humano a través de sus expresiones artísticas. Además, mi fascinación por la espiritualidad oriental, me llevó a estudiar sánscrito y a profundizar en el pensamiento de las tradiciones antiguas de sabiduría. Llegado el momento, y después de transitar épocas de inestabilidad psicológica, el corazón me dirigió a la práctica de la meditación y a nuevos estudios dentro del ámbito de la terapia, gracias a los cuales descubrí el silencio y toqué mi esencia más íntima. Desde luego, ahí contacté conmigo desde otro punto: uno más auténtico, en paz y respetuoso, dándome cuenta de mi amor por la escucha emocional. Ya no me sentía sola, de repente, podía ver en toda su complejidad y ternura al otro, y sí, a mí misma. Seguí avanzando, formándome en diferentes áreas dentro de la salud integral hasta que, finalmente, como si me estuvieran esperando desde hacía tiempo, vinieron el yoga y el ayurveda, y posteriormente, la nutrición más científica, disciplinas que me han llevado a entender y amar mi cuerpo mucho más de lo que podía esperar. Dentro de la nutrición, me especialicé en nutrición emocional y nutrición infantil, un campo en el que aún queda mucho por investigar y que considero clave para alcanzar una sociedad realmente sana tanto física como psicológicamente. Finalmente, después de haber empezado a trabajar con la infancia a través de la nutrición, llegó lo más bonito que podía imaginar: el yoga infantil. Descubrir que también podía acompañar a los niños y niñas del mundo a vivir con mayor armonía con ellos mismos y con su entorno, para mi fue un despertar enorme y sigo viviéndolo hoy día como una gran oportunidad.

Con todo, me doy cuenta de que mi trabajo con las personas, adultos o niños/as, siempre va a estar sujeto a que se entiendan mejor, a que vivan más en paz, a que sean más libres. Da igual cuales sean los motivos por los que te acerques a mi (nutrición, emociones, meditación, etc.): Ese siempre va a ser el eje de mi acompañamiento y el que más destacan los pacientes y alumnos que he tenido.

Y me gustaría decirte algo: la salud es un proceso. Podemos descuidarla y se resentirá. Podemos cuidarla y crecerá como una preciosa planta, transmitiendo luz, fortaleza y vitalidad. Al igual que todas las partes de un árbol son importantes, desde las raíces hasta las altas hojas, así también lo son todas las nuestras. Cuerpo, emociones, pensamientos, energía, alma, espíritu. Solo necesitamos reconocerlas desde nuestra sensibilidad y darles el valor real que tienen. Te animo a que las mires, les des espacio y las mimes.

Si quieres estar al tanto de lo que voy publicando periódicamente en Instagram, me encontrarás en @conscienciabierta (cuenta que aúna todo lo que soy)

@_nutricionconamor (cuenta específica sobre nutrición emocional y nutrición infantil)

@iogainfantil (cuenta específica sobre yoga con peques)

@sensibiliz.arte (cuenta específica sobre cómo nos hace sentir el arte, relacionada también con arteterapia)